Casa de Venados alberga la colección privada más grande del mundo de arte popular y contemporáneo mexicano, con más de 3,000 piezas de calidad museística principalmente elaboradas en madera y arcilla. Ubicada en Valladolid, Yucatán, a solo dos horas de Playa del Carmen, esta joya cultural ocupa una impresionante propiedad de 18,000 pies cuadrados.
La Casa de los Venados Valladolid no es simplemente un museo, sino también una de las haciendas más antiguas de la ciudad, que data del siglo XVII. Durante los recorridos guiados, disponibles tanto en español como en inglés, los visitantes pueden admirar obras que representan las tradiciones culturales de los 32 estados de México. Además, con una donación sugerida de 80 pesos que apoya a organizaciones benéficas locales, Casa de los Venados Valladolid ofrece una experiencia cultural inolvidable que combina historia, arte y arquitectura en un solo lugar.
El fascinante relato de la Casa de los Venados comienza en el año 2000, cuando John y Dorianne Venator, una pareja estadounidense, visitaron Valladolid en busca de una residencia [1]. Durante su recorrido por la ciudad, descubrieron una imponente casona colonial abandonada desde 1964 con un sencillo letrero de «Se vende» [1].
Lo que muchos ignoran es que el nombre «Casa de los Venados» tiene un significado especial. «Venator» significa «cazador» en inglés, cuya pronunciación se asemeja a «venado» en español, influyendo así en la elección del nombre para este extraordinario museo [2].
Después de explorar numerosas regiones de México, los Venator eligieron Valladolid por considerarla tranquila, segura, con habitantes amables y buenos servicios públicos [3]. Simplemente se «enamoraron» de esta propiedad del siglo XVII y decidieron convertirla en su residencia principal [3][4].
Durante casi una década, John y Dorianne trabajaron incansablemente en la restauración de esta joya arquitectónica [5][4]. El proyecto no solo revivió la belleza colonial de la estructura, sino que también creó un espacio ideal para exhibir su extraordinaria colección de arte popular mexicano [4]. Esta impresionante transformación ha ganado diversos premios de arquitectura y reconocimiento tanto nacional como internacional [1].
«Nos encanta el arte popular mexicano por su fuerza, sencillez e integridad artística», explican los Venator [5][3]. A lo largo de más de 35 años coleccionando, han establecido vínculos personales con muchos de los artistas, adquiriendo la mayoría de las piezas directamente de sus creadores [5][3][6].
Inicialmente, los propietarios concibieron un ambicioso proyecto que incluiría un Hotel Boutique, un área para eventos sociales, una residencia personal y una galería de arte en colaboración con importantes instituciones como el Museo de Arte Contemporáneo de Yucatán, el Museo de Artes Popular de México y el Museo de Arte de Chicago [2].
Actualmente, la Casa de los Venados no solo funciona como museo sino también como centro cultural activo donde se organizan eventos especiales, conciertos y exposiciones temporales que enriquecen aún más la experiencia de los visitantes [7].
La magnitud del proyecto de restauración de la Casa de los Venados resulta impresionante cuando se conoce el estado original de la propiedad. Cuando los Venator adquirieron esta mansión colonial del siglo XVII, la edificación presentaba un deterioro significativo. Aunque conservaba la primera crujía en un estado medianamente sano, el resto de la estructura —incluido el patio central— se encontraba prácticamente en ruinas [2].
Durante casi una década, los propietarios dedicaron tiempo y recursos para transformar estas ruinas en una joya arquitectónica digna de admiración. La meticulosa restauración no se limitó a reconstruir paredes y techos; implicó un delicado equilibrio entre preservar elementos arquitectónicos históricos y adaptar el espacio para su nuevo propósito como museo [4].
La arquitectura de la Casa de los Venados destaca por sus techos altos, patios interiores llenos de plantas tropicales y exquisitos detalles coloniales. Estos elementos fueron cuidadosamente restaurados respetando las técnicas y materiales tradicionales, mientras se incorporaban discretamente comodidades modernas. El resultado es un ejemplo perfecto de cómo se puede honrar la historia mientras se adapta un espacio a necesidades contemporáneas [7].
Este ambicioso proyecto contempló originalmente múltiples usos para el inmueble. Los Venator visualizaron un Hotel Boutique, áreas para eventos sociales, una residencia privada y una galería de arte que colaboraría con importantes instituciones como el Museo de Arte Contemporáneo de Yucatán, el Museo de Artes Popular de México y el Museo de Arte de Chicago [2].
El éxito de esta restauración no ha pasado desapercibido para los expertos. La casa y su arquitecto han recibido cuatro premios arquitectónicos importantes en los últimos nueve años, generando interés entre profesionales y estudiantes de arquitectura de todo el mundo que visitan la propiedad para estudiar sus características [2]. Este reconocimiento posiciona a la Casa de los Venados como un referente en la preservación del patrimonio arquitectónico mexicano.
Asimismo, la restauración ha contribuido significativamente a la revitalización cultural de Valladolid. Lo que comenzó como un proyecto personal de los Venator se ha convertido en un importante punto de interés turístico y cultural, atrayendo visitantes que buscan apreciar tanto la arquitectura colonial restaurada como la extraordinaria colección de arte que alberga [6].
Lo extraordinario de la Casa de los Venados va mucho más allá de su arquitectura colonial. Esta residencia privada alberga la colección de arte popular mexicano más grande en manos particulares, con más de 3,000 piezas de calidad museística [8]. Cada rincón de esta mansión ofrece un deslumbrante panorama artístico que representa la diversidad cultural de México.
Desde que se ingresa al zaguán, el visitante queda inundado por una explosión de colores y formas: cuadros, estatuillas, adornos, muebles, lámparas y textiles procedentes de todo el país [9]. Los recorridos guiados ofrecen explicaciones detalladas sobre cada pieza, revelando la historia detrás de la colección que John y Dorianne han construido durante más de 35 años [6].
Entre las obras más destacadas se encuentran los alebrijes, figuras fantásticas y coloridas originarias de Oaxaca; máscaras ceremoniales de diversas regiones; y textiles elaborados con técnicas ancestrales por manos indígenas [4]. Por supuesto, las icónicas calaveras mexicanas aparecen en múltiples formatos y escenas, convirtiéndose en uno de los motivos más reconocibles [9].
Lo que distingue a esta colección es su carácter personal y la forma en que se exhibe. A diferencia de los museos tradicionales, las piezas no están encerradas en vitrinas sino integradas al entorno cotidiano de la casa [4]. Asimismo, los Venator han establecido relaciones cercanas con muchos de los artistas, adquiriendo la mayoría de las obras directamente de sus creadores [3].
«Nos encanta el arte popular mexicano por su fuerza, sencillez e integridad artística», explica John Venator [3]. Esta pasión se refleja en cada selección, desde jarrones de Talavera y textiles bordados de Chiapas hasta piñas de cerámica de Michoacán y cerámica de Mata Ortiz [10].
En la Casa de los Venados también se realizan eventos culturales como conciertos y exposiciones [11], reafirmando su papel como centro cultural activo. Además, los propietarios abren diariamente su casa al público, destinando las donaciones recibidas a beneficiar a la comunidad local [8].
Sin duda alguna, Casa de los Venados representa uno de los tesoros culturales más valiosos de la Península de Yucatán. Esta joya arquitectónica restaurada meticulosamente durante casi una década ofrece una experiencia única donde historia, arte y tradición se entrelazan de manera armoniosa.
La pasión de John y Dorianne Venator por el arte popular mexicano ha resultado en un legado extraordinario para Valladolid. Gracias a su visión, lo que comenzó como una casona colonial abandonada se transformó en un museo viviente que alberga más de 3,000 piezas artísticas de calidad museística.
Casa de los Venados destaca, además, por su enfoque innovador de exhibición. A diferencia de los museos tradicionales, aquí las obras se integran al espacio cotidiano, permitiendo apreciar el arte popular mexicano en su contexto más auténtico. Este concepto, junto con los recorridos guiados disponibles tanto en español como en inglés, proporciona una experiencia cultural enriquecedora para visitantes nacionales e internacionales.
La contribución de este museo privado va más allá del ámbito cultural. Las donaciones recibidas durante las visitas se destinan a organizaciones benéficas locales, generando un impacto positivo en la comunidad vallisoletana. De esta manera, los Venator no solo han preservado un importante patrimonio arquitectónico y artístico, sino que también han creado un modelo sostenible de turismo cultural.
Para quienes planean visitar la Península de Yucatán, Casa de los Venados constituye una parada obligatoria. Los interesados en conocer más sobre este tipo de experiencias culturales auténticas pueden consultar el blog de www.casatulita.com.mx, donde encontrarán información complementaria sobre el arte y la cultura mexicana.
[1] – https://pptotravel.com/2016/10/05/casa-de-los-venados/
[2] – https://topyucatan.com/notas/museos/casa-de-los-venados-un-museo-de-arte-privado-en-valladolid
[3] – https://yucatantoday.com/blog/casa-de-los-venados-valladolid-2
[4] – https://vivevalladolid.mx/casa-de-los-venados-valladolid/
[5] – https://posadatravel.mx/tour/museo-casa-de-los-venados/
[6] – https://escapadas.mexicodesconocido.com.mx/atractivos/casa-de-los-venados/
[7] – https://blog.valladolid.mx/casa-de-los-venados/
[8] – https://larutadelosmuseos.com/index.php?id_museo=1&id_idioma=
[9] – https://www.lavanguardia.com/magazine/viajes/20240902/9900631/mayor-coleccion-arte-folclorico-mexicano-esconde-casa-privada-yucatan.html
[10] – https://www.royalresorts.com/blog/es/noviembre-2021/un-poco-del-mexico-antiguo-valladolid/
[11] – https://programadestinosmexico.com/casa-de-los-venados-valladolid/
Calle 42 No. 207D x 43 y 45 Valladolid, Yucatán
(a 2 esquinas de la Plaza Principal)
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